Lechter

El jueves tuve ocasión de ver, por segunda vez, el final de Hannibal, segunda película cronológicamente creada hablando, pero que cierra la trilogía de Hannibal Lechter.
Cuando me refiero al final, es porque aun no he visto el principio, por diversas circunstancias que tiene la vida, y a pesar de que El silencio de los corderos me parece una obra maestra y el dragón rojo muy buena película.
El porque me gustan esas películas está claro, al menos para mí, me fascina el personaje.
El mismo Anthony Hopkins se preguntaba en una entrevista como es posible que un asesino caníbal caiga tan bien a la gente, supongo que exhala un aura muy poderosa como personaje.
Un psiquiatra, extremadamente inteligente y estudioso de la condición humana, la psicología no tiene secretos para el, que acaba comiéndose a la gente, pero matar por matar? no, simplemente le gusta el sabor de la carne humana, vamos que encima de ser psiquiatra es un gourmet.
Que clase de mente humana puede albergar esa forma de actuar sobre la vida? no alcanzo a entenderlo, y tal vez sea esa faceta, la desconocida la que más me atrae del personaje.
Quien sabe igual todos tenemos un poco de Lechter dentro de nosotros, no digo que debiéramos comernos unos a otros cual horda de zombies ansiosa por cerebros frescos, sino el hecho de la curiosidad innata hacia las cosas prohibidas, solo que solo algunas personas son capaces de cruzar la línea...