domingo, marzo 11, 2007

Viaje

He estado este fin de semana de viaje, por tierras manchegas, un viaje de 4 horas en cada sentido para llegar a casa de mi abuela paterna.
Y que decir, si normalmente tengo tiempo para pensar, no es difícil imaginar el tiempo libre que he tenido allí, dos días de nada que hacer, televisión de calidad pésima, sin internet, hay veces que me creía en la edad media.
Me he dedicado a la literatura, un libro de 478 paginas sobre la 2ªGM y espionaje en dos días, aborrezco estar desinformado.
Y luego queda la tortura del viaje, sin conversación, con la única salvación de mi leal mp3 e intentando distraerme en la medida de lo posible.
Primero me he dedicado a contar el numero de rayas de la carretera, intentaba ver cuantas habían por kilómetro y multiplicado por el numero de kilómetros, lo cual es difícil cuando al conductor no para de variar la velocidad, luego me he fijado que en las carreteras recientes la separación de las rayas discontinuas es variable según la proximidad de una zona de adelantamiento prohibido, más cercanas cuanto más cerca de la línea continua, en cambio, en las carreteras más antiguas no se aprecia el detalle.
También he contado 5 o 6 campos de molinos de viento distintos, de los cuales 3 eran nuevos de un año para aquí, me gustan los molinos, son bonitos, esbeltos y hacen algo realmente bueno.
También, viendo los campos de cultivo, no cesaba de imaginar los métodos de cultivos, dejadez de algunos, las formas extrañas e inútiles, el desaprovechamiento, y sin pretenderlo, y coincidiendo con el libro reciente de los pilares de la tierra, lo poco que han avanzado respecto a métodos de cultivo, y la estructura de carreteras, que es bastante desaprovechada.
También un servidor no puede evitar fijarse en la terrible diferencia en cuanto a la forma de pensar que hace gala mi familia respecto a mi, me siento extraño realmente, y puedo afirmar que aborrezco bastante las anécdotas reiterativas que hacen gala para amenizar sus conversaciones.
También me he dado cuenta que me he vuelto adicto a mi música, no solo para aislarme del exterior, sino para pensar, disfruto del silencio, por supuesto, pero además disfruto cada nota que llega a mis oídos por la forma que me hace sentir.
Y bueno, intento evitar los viajes, pero bueno, casi siempre caen en exámenes :D

5 comentarios:

makore dijo...

Ostras, pobre del que te tuviera que aguantar escuchándote hablar durante 4 horas dentro del coche, o acababa loco o el conductor te tiraba del coche xD

Lo de las lineas discontinuas, en efecto es así, si te sacaras el carnet sabrías que conforme se acerca una linea continua el espacio entre discontinuas es más estrecho

¿Que visión tiene tu familia de tu forma de ser? no sueles ser el único. La verdad que me cuesta pensar que podría decir la gente mayor si supieran quien en verdad eres (vamos, todo un hannibal lecter en potencia). Tu problema es que calladito pareces tan mono... xDDD

¿Van por ahí los tiros?

Unknown dijo...

No no, en el coche hablo lo estrictamente necesario, al menos con mi familia eso tiende a cero minutos.
Un Hannibal Lechter? que va, el problema es que piensan eso y soy justo lo contrario XD

Quasar dijo...

Pues a mí los viajes me gustan si se hacen con amigos, o gente con la que poder hablar de cualquier cosa, son interesantes y me gustaría hacer más :)

En cuanto a lo de distraerse, pues lamentablemente todos necesitamos ciertas cosas que antes no se necesitaban, en el campo y tal, al menos si no vamos con amigos como decía antes...

Yo con amigos no necesito nada más, ni mp3, ni internet, ni móvil, ni nada. Peor si vas sólo, bueno, puedes explorar el campo, pero estamos tan acostumbrados a ver miles de cosas distintas por la red, que ya nos imaginamos todo lo que vamos a ver dando una vuelta por el campo, y no resulta tan agradable.

Aún así, puede llegar a serlo, un árbol que sea distinto a los demás te puede dar que pensar, o una tela de araña, cualquier cosa... y un pensamiento siempre lleva a otro.

No sé, me gusta el campo y la playa :P
(Con la familia ha de ser terrible, sí) XD

Anónimo dijo...

No hablas con tu familia, te aburren los viajes largos, lees y escuchas música para pasar el rato y si no puedes soportarlo más te pones a contar lo primero que aparece por la ventana... pero no te creías tan distinto a los demás en todo? xD

Unknown dijo...

Hablo lo justo, odio las conversaciones inútiles, y si, me pongo a contar y buscar reglas de todo lo que aparece por la ventana, si es necesario intento calcular porque los molinos de aire están dispuestos así, calculo su altura respecto a referencias fijas y calculo la energía que producen por hora, por aburrimiento.